Casi todos los artículos sobre long Covid coinciden en llamar así a la persistencia de signos y síntomas multiorgánicos después de los 3 meses de haber padecido una enfermedad aguda. Todavía la fisiopatología del mismo sigue siendo controversial pero una revisión de casi 100 artículos ha encontrado que los mecanismos pueden ser múltiples, entre ellos una acción viral directa en algunos órganos mientras que en otros predominan los mecanismos inflamatorios o mediados inmunológicamente. Por ejemplo, una acción directa del virus sobre las células beta del páncreas, un mecanismo inflamatorio que provoca fibrosis en el pulmón o una disfunción endotelial que activa los mecanismos de la coagulación en el sistema cardiovascular, entre otros mecanismos que explicarían la compleja fisiopatología de este síndrome.
En 2022 se publicó un gran estudio que utilizó datos de dos poblaciones, una cohorte de 11 millones de la ciudad de New York (cohorte INSIGHT) y otra de casi 17 millones del Estado de Florida (cohorte OneFlorida+). Este estudio es parte de la iniciativa Researching COVID to Enhance Recovery (RECOVER) del Instituto Nacional de Salud (NIH) de Estados Unidos. Se midieron 137 problemas de salud y 459 tratamientos que se utilizaron para los pacientes que habían referido síntomas prolongados.
Cohorte INSIGHT (New York). Datos hasta noviembre de 2021
Los colores representan diferentes sistemas de órganos. Los pacientes femeninos, mayores y no blancos tenían un mayor exceso de casos de síntomas post agudos. El estado de comorbilidad también desempeñó un papel importante, aunque la disnea mostró consistentemente el mayor exceso de carga de enfermedad. Se identificó un mayor número de posibles síntomas post agudos en pacientes con problemas cardíacos, diabetes tipo II y enfermedad renal crónica.
En general, las probabilidades de ocurrencia de los síntomas identificados en la cohorte INSIGHT fueron más altos que en la cohorte OneFlorida+. Específicamente, las tasas de tromboembolismo y fibrosis pulmonar que fueron un 50 % mayores en la cohorte INSIGHT.
Se identificaron nueve diagnósticos y nueve medicamentos en la cohorte OneFlorida+ en comparación con 25 diagnósticos y 51 medicamentos en la cohorte INSIGHT. La heterogeneidad en los resultados podría deberse a diferentes períodos de infección y características de los pacientes.
Fortalezas y limitaciones
La gran cantidad de pacientes que se han sumado entre ambas cohortes probablemente permita capturar la heterogeneidad de los síntomas en estos pacientes. Además de haberse recolectado información que abarca a períodos donde múltiples variantes (salvaje, alfa y delta) atacaron a esta población. La desventaja es que no fue un estudio aleatorizado aunque los investigadores intentaron equilibrar algunos factores de confusión hipotéticos. Otra limitación es que fue antes de la era de ómicron y que no se recolectó información sobre el estado vacunal de los individuos.
Comparación entre ambas cohortes
Referencias
1. D. Castanares-Zapatero, P. Chalon, L. Kohn, M. Dauvrin, J. Detollenaere, C. Maertens de Noordhout, C. Primus-de Jong, I. Cleemput & K. Van den Heede (2022) Pathophysiology and mechanism of long COVID: a comprehensive review, Annals of Medicine, 54:1, 1473-1487, DOI: 10.1080/07853890.2022.2076901
2. Understanding Post-Acute Sequelae of SARS-CoV-2 Infection through Data-Driven Analysis with Longitudinal Electronic Health Records: Findings from the RECOVER Initiative.
Chengxi Zang, Yongkang Zhang, Jie Xu, Jiang Bian, Dmitry Morozyuk, Edward J. Schenck, Dhruv Khullar, Anna S. Nordvig, Elizabeth A. Shenkman, Russel L. Rothman, Jason P. Block, Kristin Lyman, Mark Weiner, Thomas W. Carton, Fei Wang, Rainu Kaushal
No hay comentarios.:
Publicar un comentario