En diciembre de 2021, la variante ómicron del SARS-CoV-2 pasó a ser predominante en los Estados Unidos. Posteriormente, la incidencia de casos comenzó a crecer, como lo hizo en otros lugares del mundo, Argentina incluido. Se piensa que los métodos tradicionales de vigilancia, es decir la notificación de casos no captura todos los eventos con el virus, ya que hay casos que son asintomáticos, mientras que otros no son diagnosticados o no son informados; por lo tanto, la proporción de la población con anticuerpos contra el SARS-CoV-2 (es decir, la seroprevalencia) puede mejorar la comprensión de la incidencia de COVID-19 a nivel de población.
El informe del CDC es un informe que examina la tendencia en la seroprevalencia en todos los Estados Unidos entre septiembre de 2021 y febrero de 2022, evaluados por grupo de edad. Para esta encuesta se analizan anticuerpos de la anti-nucleocápside (anti-N) que se producen como respuesta a la infección, pero diferente al que producen las vacunas (anti-Spike o anti-S). Las muestras se extrajeron de cerca de 74 mil personas hasta enero y unas 46 mil en febrero.
Hallazgos:
La seroprevalencia global, para todas las edades, se incrementó entre septiembre y diciembre entre casi un 1 y 2% mensual. Pero desde diciembre a febrero el aumento fue de un 33%.
En niños de 0 a 11 años la seroprevalencia en febrero de 2022 era del 75%, y lo mismo pasó en adolescentes hasta 17 años.
Entre los 18 y 49 años del 63%.
Y entre los 50 y 64 años del 50%, mientras que en mayores de 65 años fue del 33%.
Es decir que el incremento fue brusco entre diciembre y febrero, y la seroprevalencia es menor a medida que aumenta la edad.
Los autores también dejan en claro las limitaciones, de las cuales la más importante sin duda es que no se pueden generalizar estos datos, ya que la selección de la muestras analizadas no fue al azar. y las personas infectadas podrían estar sobrerrepresentadas en este estudio, ya que suelen ir a centros de atención médica con mayor frecuencia. Por otro lado también subestima a aquellos que padecieron más de una reinfección.
No existe una explicación biológica para esto, pero si cultural, es probable que a mayor edad las personas se hayan cuidado más, por ejemplo limitando sus actividades, y por ende con menor probabilidad de exposición al virus. Tampoco sirve para afirmar que los niños contagian a los adultos, o al revés.
En Argentina se había publicado que en Puerto Madryn (Chubut) sobre casi mil personas se encontró una seroprevalencia global del 39%, pero en menores de 15 años fue de casi el 47%. Cuando solo se había confirmado la infección en un 9.35% de la población general y en el 1.4% de los menores de 15 años. En un tiempo donde el virus salvaje predominaba (marzo y abril de 2021) y apenas había comenzado la campaña de vacunación. Esto es una seroprevalencia de al menos 4 veces mayor que los casos reportados.
Al comienzo de la variante ómicron, en diciembre de 2021, en Sudáfrica sobre 7010 personas se había vacunado un 19% de los mismos. Pero el nivel de anticuerpos estaba elevado en un 93% de los mismos, y entre los no vacunados se encontró un incremento de anticuerpos de hasta en un 68%. Aunque no se especificaba que tipo de anticuerpos se había medido los autores concluían en el estudio que la inmunidad previa de la población era más alto que el esperado.
En los tres estudios la prevalencia de la población con anticuerpos presentes ha sido muy superior a lo que se preveía, ya sea por reportes de infección o por vacunación. Asociando esto con las infecciones reportadas en Argentina, más de 9 millones, donde muchos sugieren que en especial en la tercer ola con la variante ómicron existió subregistro, implica que hasta hoy al menos un 20% de la población ha padecido la infección, al menos una vez, en Argentina, por lo que sería esperable un número mucho mayor de personas inmunizadas naturalmente.
Es imposible generalizar los datos de prevalencia a la población general, pero los altos números de reportes de infección, una gran cobertura en vacunación y una probable subestimación del número real de infectados son buenas noticias, para enfrentar potenciales olas en un futuro inmediato, al menos en lo que se refiere a los casos graves y la mortalidad, no tanto el riesgo de re infección y por ende también el de Covid persistente. Ya que estas tres situaciones combinadas nos induce a pensar que la inmunidad poblacional alcanzada puede ser más alta que la pensada.
Referencias
1. Clarke KE, Jones JM, Deng Y, et al. Seroprevalence of Infection-Induced SARS-CoV-2 Antibodies -United States,
September 2021–February 2022. MMWR Morb Mortal Wkly Rep 2022;71.
2. Schonfeld D, Fernandez H, Ramirez J et al. SARS-CoV-2 seroprevalence in the city of Puerto Madryn: underdiagnosis and
3. Estudio Sudafricano sobre prevalencia de la inmunidad en : South African Population Immunity and Severe Covid-19 with Omicron Variant.
Shabir Madhi, Gaurav Kwatra, Jonathan E Myers, Waasila Jassat, Nisha Dhar, Christian K Mukendi, Amit Nana,
Lucille Blumberg, Richard Welch, Nicoletta Ngorima-Mabhena, Portia. medRxiv 2021.12.20.21268096;
4. Se mantiene la inmunidad celular frente a infecciones previas con la variante ómicron 20 meses después: Guo L, Zhang Q, Zhang C, et al.
Assessment of Antibody and T-Cell Responses to the SARS-CoV-2 Virus and Omicron Variant in Unvaccinated Individuals Recovered From
5. 47% de seroprevalencia en una universidad de Manila, en diciembre de 2021.
The prevalence of SARS-CoV-2 antibodies within the community of a private tertiary university in the Philippines: a serial cross
sectional study. Lourdes Bernadette C. Sumpaico-Tanchanco, Jenica Clarisse Y. Sy, Angel Belle C. Dy, Myla Levantino,
Arianna Maever L. Amit, John Wong, Kirsten Angeles, John Paul C. Vergara. medRxiv 2022.04.25.22274280;
El doble de lo reportado por testeos. Entre los 17 y 26 años el 76% . Pero tres cuartos de la población tiene
inmunidad celular.
7. 33% de seroprevelancia en Benín, mucho más de lo esperado.
. Interest of seroprevalence surveys for the epidemiological surveillance of the SARS-CoV-2 pandemic in African populations:
insights from the ARIACOV Project in Benin. Parfait Houngbégnon, Odilon Nouatin, Anges Yadouleton, Benjamin Hounkpatin, Nadine Fievet,
Eloïc Atindegla, Sebastien Deschavanne, Emilande Guichet, Ahidjo Ayouba, Raphaël Pelloquin, David Maman, Guillaume Thaurignac, Martine
Peeters, Annonciat Aviansou, Salifou Sourakafou, Eric Delaporte, Achille Massougbodji, Gilles Cottrell. medRxiv 2022.04.26.22274330;
Disminución del riesgo de reinfección en no vacunados del 35% a los 9-11 meses de la infección inicial. Cuanto más grave es la infección más
protección (hasta un 68% en casos graves). Los que se infectaron y vacunaron tienen una efectividad del 83% frente al 73% de
quienes no se han vacunado, con 3 dosis de vacuna. La infección preveno la hospitalización en un 81% y aumentó al
97% con tres dosis. Con dos dosis la inmunidad no había caído a los 11 meses. Los autores sugieren que en infectados, 3
dosis tienen un efecto marginal en la efectividad.
Protection against Omicron re-infection conferred by prior heterologous SARS-CoV-2 infection, with and without mRNA vaccination
Sara Carazo, Danuta M Skowronski, Marc Brisson, Chantal Sauvageau, Nicholas Brousseau, Rodica Gilca, Manale Ouakki, Sapha Barkati,
Judith Fafard, Denis Talbot, Vladimir Gilca, Geneviève Deceuninck, Christophe Garenc, Alex Carignan, Philippe De Wals, Gaston
Seroprevalencia en Jordania 75%, 45% entre los no vacunados y que no refieren infección
Seroprevalence of SARS-CoV-2
Antibodies among vaccinated and non-vaccinated adults in the West Bank:
Results of a repeated cross-sectional
study
Faisal Awartani, Nouar Qutob, Mohammad Asia, Waleed Deeb
medRxiv 2022.05.06.22274755; doi: https://doi.org/10.1101/2022.05.06.22274755
44% de las infecciones son asintomáticas en una revisión. Asymptomatic SARS-CoV-2 infection by age: A systematic review and
meta-analysis. Bing Wang, Prabha Andraweera, Salenna Elliott, Hassen Mohammed, Zohra Lassi, Ashley Twigger, Chloe Borgas, Shehani
Differential COVID-19 infection rates in children, adults, and elderly: evidence from
38 pre-vaccination national seroprevalence studies
Cathrine Axfors, Angelo Maria Pezzullo, Despina Contopoulos-Ioannidis, Alexandre Apostolatos,
John P. A. Ioannidis
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