15 de abril de 2010

Lo mejor para la tristeza


Lo mejor para la tristeza es aprender algo. Eso es lo único que nunca falla. Puedes envejecer y sentir temblar tu anatomía, puedes permanecer despierto por la noche escuchando el desorden de tus venas, puede extrañar a tu único amor, puede ver el mundo a tu alrededor devastado por la ambición de lunáticos malvados, o saber que tu honor es pisoteado en las cloacas de las inteligencias inferiores. 
Entonces, solo hay una cosa: aprender. Aprender por qué el mundo se mueve y lo que hace que este se mueva. Eso es lo único que la mente nunca puede agotar, nunca alienar, nunca torturar, nunca temer o desconfiar, y nunca soñar con arrepentirse. Aprender es lo mejor para ti. Mire alrededor cuántas cosas hay que aprender: la ciencia pura, la única pureza que hay. Puede aprender astronomía en toda la vida, historia natural en tres, literatura en seis. Y luego, después de haber agotado un millón de vidas en biología, medicina, teología, geografía, historia y economía, puedes empezar a hacer una arco con la madera apropiada o pasar cincuenta años aprendiendo a empezar a aprender a batir a tu adversario en la esgrima. Y una vez terminado, después de eso, puedes comenzar de nuevo con las matemáticas hasta que llegue el tiempo de aprender a arar la tierra.

The Once and Future King (Camelot). Terence H. White. 

Imágen: A really old Merlin is looking at what's left of Camelot's castle, which, centuries after its glorious days, is now in ruins. This is the result of an a... Ruins of Camelot.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario