Es preciso determinar la presión ambulatoria mediante monitorización ambulatoria de la presión arterial (MAPA) según la disponibilidad en la evaluación inicial de todo hipertenso con mal control confirmado en la consulta.
Hay que definir la hipertensión de bata blanca en función la normalidad de los tres períodos de MAPA (día, noche y 24 horas).
Hasta un 18% de estos pacientes podrían tener un alto o muy alto riesgo cardiovascular, por lo que se debe valorar el riesgo.
Hay que evitar la determinación de presión arterial rutinaria al hipertenso de bata blanca conocido. No son útiles para tomar decisiones clínicas ni terapéuticas. Aunque si para tranquilizarlo.
Tras el diagnóstico de hipertensión de bata blanca, es conveniente delegar en el propio paciente la monitorización de su presión arterial mediante MAPA.
Hay que realizar regularmente (anual o bianualmente) una MAPA. Un porcentaje anual variable de hipertensos de bata blanca desarrollan hipertensión sostenida.
Debemos intervenir precozmente sobre los otros factores de riesgo y sobre los estilos de vida del paciente. En pacientes de alto riesgo, con lesión orgánica subclínica o con enfermedad cardiovascular concomitante hay que valorar el inicio inmediato de tratamiento antihipertensivo.
Referencias
Hipertension de bata blanca. Criterios de abordaje y pronósticos. Formación Médica Continua. Ernest Vinyoles Bargallot. 2020
Guia de práctica clinica. JNC 7 Report.
Reporte completo aqui.